Mi nuevo gimnasio

Aquí estoy haciendo tonterías en mi gimnsasio, la verdad es que me gusta, puedo estar un ratito y me entretengo aunque claro al poco me aburro y quiero que me hagan caso.

Intentando gatear

Aquí estoy luchando por intentar gatear, realmente no es nada fácil y de momento no me muevo pero estoy a puntito de hacerlo.

Sesión de SPA

Pequeña sesión de SPA que me dieron en casa. ¡Hay que cuidarse!

Primer día de cole

Ya sabía yo que tarde o temprano se acabaría lo bueno, y ha sido antes de lo que yo esperaba. Sí señores, hoy he ido a la guarde por primera vez, sólo ha sido un ratito y mi mami estaba allí, pero eso de madrugar creo que he decidido que no va conmigo, he pensado que lo mejor es vivir del cuento así que voy a ver cómo me lo monto a partir de ahora pero no me hace gracia esto de las clases. Es que yo soy la más pequeña y claro todos me pueden porque se pueden sentar, pueden moverse y esto no puede ser, porque ha venido un chavalillo y me ha cogido el juguete que yo tenía, y entonces he pensado "¡No huyas cobarde, vuelve aquí si eres hombre!" Pero me ha sido imposible, he intentado hacer la croqueta y acercarme por la espalda pero no logré moverme más de medio metro, lo cual como ya imaginaréis no fue suficiente. Pero le tengo fichado, ese va a ser el primero que va a probar mis dientes (en cuanto me salgan claro), aunque de momento voy a mazarme haciendo gimnasia y le haré suplicar y llorar como la nena que es, por robar a una pobre damisela en apuros.

Y por fin me bauticé

Pues sí, al final salió todo bien y no hubo incidentes, lo pasamos en grande, pude quitarme una espinita que tenía clavada con eso de la manzana, el jardín del Edén y el pecado original y no sé qué jaleos y ya me he vuelto casta y pura. Tal vez esté mal que yo lo diga pero estaba hecha un pivón. Estoy segura de que todos lo visteis, y estoy convencida de no equivocarme si afirmo con rotundidad que era la más guapa de todos los que iban allí. Llevaba mis mejores galas y mi mejor sonrisa, y ni qué decir tiene que algunos de los que fueron ni siquiera se vistieron para la ocasión, lo cual me dejó en clara ventaja pero aún así no tenían nada que hacer. También es cierto que pasé medio día que si la epi-lady, que si los rulos, el maquillaje, las pestañas... Bueno vosotras sabéis de lo que hablo, medio día en la pelu y luego encima cuando llego a casa me tengo que depilar, menos mal que ya había recogido el traje en la tintorería.
Luego nos fuimos a darle al bocata y a tomar un refrigerio, y con la gente que había allí si llegan a ser clientes cuando salgan con lo que se hubieran dejado me compro el corte inglés de Goya. Madre mía menudo jolgorio que había allí montado, pero la verdad es que me gustó porque estaba toda la familia reunida, que no había tenido oportunidad de verlos a todos en amor y compañía, claro que he pensado que para la comunión casi que voy a alquilar el Palacio de los Deportes para que no estemos tan apretujados.
De verdad que muchas gracias a todos por venir, nos vemos en Navidad.

Me voy a hacer deporte

Nos hemos convertido en unos domingueros, ahora me bajo con mi padre al polideportivo de aquí al lado a ver a una panda de demacrados pegarle patadas a un balón, lo cual creo que es un buen calentamiento para que el año que viene cuando a mi papi le suban el sueldo y me haga socia del Real Madrid pueda ir al Bernabéu y sentirme como en casa. La verdad es que no está tan mal, yo me quedo croqueta perdida antes de llegar a la esquina y no me despierto hasta que nos vamos pero algún ratillo que aguanto creo que se puede decir que es incluso entretenido, aunque realmente lo hago porque sé que a mi padre le hace mucha ilusión el poder estar un tiempo padre e hija a solas, y sobre todo le encanta poderse bajar a ver los partidos mientras mamá se queda en casa haciendo limpieza y pasando la aspiradora hasta que da la hora de comer. Pues eso, digamos que unos ganan más que otros pero en general disfruto bajando a dar una vueltecilla por el barrio, y desde luego es mucho mejor que cuando me llevaba a ver a los carcamales jugar a la petanca, que parece que en cualquier momento según se agachan a alguno se le va a parar la patata y vamos a tener que llamar al juez, que yo creo que antes de empezar llaman al 112 y dejan la llamada en espera. Bueno, lo dicho, vivan los domingos con fútbol y viva la limpieza general.

¡ Qué estresada estoy!

Sí chic@s ya lo sé, hace mucho que no sabéis nada de mí, pero es que he estado muy liada con el trajín del bautizo. Así que espero que me disculpéis pero no es fácil programar algo así, y es que menudo mogollón de familia, parece la lista de Leonor, y eso que no tengo compromisos oficiales, que únicamente estoy contando con la familia directa. Pero bueno, seguro que cuantos más seamos mejor nos lo pasamos así que espero que nos divertamos y que no acabe la fiesta hasta altas horas en las que ya me tendré que acostar porque como aún no tengo DNI luego me tiran en todos los garitos.
Bueno ya tengo el temilla planeado y espero que lo paséis bien, no os olvidéis de traer ganas de fiesta, cámara de fotos y babero porque cuando me veáis salir con ese ¡pedazo de faldón! vais a desear tener 40 tallas menos, pero voy a teneros que deciros que lo siento, sólo cabe una diosa de la belleza en este mundo y el puesto está cogido vitalicio por mí. Si os portáis bien igual os dejo que me llevéis un ratito en brazos pero va a estar complicado porque me han dicho los del tomate que necesitarán un tiempo considerable porque es el evento del año.

Me encantó el viaje por el centro

Aquí podéis observar cómo disfruté del centro de Madrid. Me encantaron las lecciones de historia que me dio mi padre, creo que aprendí un montón. Se nota que estuve atenta en todo momento ¿eh? No estuvo mal el día, dimos una vuelta por la plaza mayor y luego comimos por allí y lo pasamos genial, la madrina nos invitó a comer y pude observar algunos de los sitios más típicos de mi ciudad. Aunque no lo parezca disfruté bastante, y podéis preguntarme lo que queráis de Felipe III que me lo sé todo.

Qué tipo tengo

Aún os tengo que contar algo bueno y algo malo. Lo malo es que ayer fui al médico y me pusieron tres vacunas. Qué mala leche, con lo bien que me porto, si lo sé no les dejo dormir ningún día, al menos así les pagaré con su mismo cariño. Realmente la enfermera fue muy cariñosa y se portó muy bien, pero hay que ver lo que sufren mis pobres muslitos, que cada vez que me acerco por allí me ponen fina, parezco un alfiletero. De todas maneras se me pasó al ratito y la verdad es que me gustó lo que me dijeron, que ya peso 6,390 Kg y mido 63 cm. Me dijeron que estoy por encima de la media española, que soy muy alta, pero que mi peso está estupendo, que no me sobra nada, lo cual para todas las que seáis mujeres sabréis lo que significa. Vamos, si lográis leer entre líneas lo que me dijeron es que tengo un tipazo, así que al menos saqué algo bueno de todo el trajín. Bueno, también me mandaron unas gotas de vitamina D y tal pero eso a mí ni me va ni me viene. Bueno, me voy a dar una vuelta y a lucir palmito por Madrid.

¡Uf! Menuda semana

Menuda semana que llevo. Ha empezado a hacer una rasca que no veas y esto va fatal para mi piel, menos mal que me llevan embutida en la silla y la verdad es que no paso nada de frío, apenas puedo moverme pero al menos se está calentita. Realmente me gusta salir, y además es que es bueno que me dé el aire y eso, pero hay veces que miras el cielo y dices que casi que mejor otro día. Han sido unos días interesantes, he tenido mis cosillas buenas y otras que casi mejor no recordar. Empezaremos con las buenas, y es que ya me han cambiado a una cuna de mayor, ahora ya soy una persona importante, me sobra cama por todas partes y cualquier día no me encuentro pero es que en la otra casi ni cabía. La verdad es que me gusta mucho mi nueva cama, y si os fijáis os daréis cuenta que muchos de vosotros la conocéis, porque creo que mi padre y casi todos mis tíos han dormido allí. Se respira familiaridad cuando te acuestas, creo que cuando estoy dormida profundamente siento que todos ellos me protegen y es una sensación muy agradable. Otra cosa chula de estos días es que me han montado una trona que también es un balancín y me siento en ella y es como si me bajaran a los columpios. Como soy pequeñita y no me pueden montar en los del parque pues al menos me quito el mono y lo hago en casa. Además no tengo que hacer ni cola ni nada porque es sólo para mí. Cuando aprenda a comer me servirá de mesita pero de momento la uso para divertirme.